Esta sorprendente casa familiar se ha creado a partir del antiguo Manor House Stables, hogar de un caballo ganador del Grand National. Los diseñadores optaron por mantenerlo simple y puro, conservando las particiones de madera, paredes de ladrillo y piedra, un techo a dos aguas de pendiente suave y elementos originales.
Para mantener las particiones de madera originales se hicieron algunos cambios en el plano, creando salas en las antiguas caballerizas y permitiendo que el pasillo circule a lo largo de todo el espacio. Los tres dormitorios se han ubicado en la zona oeste, mientras que la cocina y el salón se encuentran en la zona central.
Muchas de las puertas originales fueron restauradas y se encuentran dentro de la casa creando un fuerte contraste con el color blanco escogido para la totalidad de la vivienda. Mientras que las viejas ventanas con entramado de madera fueron sustituidas por modernos marcos de acero con acristalamiento. En este nuevo diseño, también se han instalado nuevos tragaluces para dotar de mayor iluminación natural a los espacios.
Se han mantenido diferentes elementos originales del establo dándoles una segunda vida con un uso completamente diferente, los anillos de inmovilización ahora hacen la función de toalleros, mientras que los comederos de los caballos ahora soportan los fregadores o lavabos.
El proyecto ha sido realizado por AR Design Studio y comentaron lo siguiente: «La idea era preservar lo existente y que cualquier nueva adición fuera simple y pura con el fin de permitir el brillo de su carácter original»