Ante el avance de la globalización, encontramos una maravillosa tendencia que le da la espalda y consiste el la elaboración de productos artesanos tradicionales de producción local. De este modo surgen artículos de calidad que cubren necesidades respondiendo a demandas regionales. Es el caso de our/Berlin, un vodka fabricado en pequeñas destilerías de Kreuzberg, una parte de un distrito berlinés, que refleja el encanto de la ciudad a la perfección.
La frialdad de su interior en el primer vistazo, se aclimata con los diferentes contrastes que encontramos en el espacio, como la madera desnuda o las alfombras que se ubican en la zona de bar. Tras sus paredes, se accede a la pequeña destilería y la zona de almacenamiento. Aquí la pasión, la atención al detalle y la artesanía clásica se unen para hacer un producto de alta calidad.
La producción de cada botella sigue un proceso manual, desde el llenado, pasando por el sellado y el etiquetado. El diseño del envase ha sido galardonado con un León de Plata en Cannes y contiene la cantidad justa para ser compartida entre amigos.
