Dariel Studio acaba de completar su último proyecto residencial en la bulliciosa Sanlitun en Beijing. Se trata de un colorido apartamento de 1500 m2, con una decoración extravagante pero extraordinaria, que rinde homenaje a la personalidad excéntrica del cliente. Doce estancias repartidas en dos plantas que conforman el actual apartamento.
El primer piso es un gran espacio abierto, no existe ningún tabique. En lugar de paredes, Thomas Dariel juega con las texturas, materiales, colores, líneas y formas para crear espacios que cuenten cada uno de ellos una historia diferente. Es mejor descubirir estos espacios a través de las imágenes puesto que es imposible nombrar la cantidad de piezas de arte contemporáneo que adornan el apartamento.