Deliqatê es un restaurante especializado en sándwiches gourmet y es el primero de esta cadena que pretende expandirse a lo largo de Brasil. Construido en el lugar de un antiguo edifico de los años 40 ya derribado, las fachadas laterales y trasera se conservaron y fueron reforzadas creando esa reminiscencia de lo que había en un pasado. El nuevo edificio se puede entender como una gran estructura de acero gris que tiene como objetivo soportar sus tres plantas interiores. Este proyecto fue realizado por FGMF Arquitetos.
Se puede observar como se ha buscado un contacto permanente entre el edificio y la calle sin utilizar muros o vallas y con un frente totalmente realizado en cristal y con botellas de vidrio en la parte trasera que hacen resaltar esta fachada. El techo de la entrada está ocupado por una gran estructura colgante que se ilumina por la noche y es parte de la composición del edificio y de su relación con el aire libre.
En la planta baja, una de las caras del espacio está ocupado casi en su totalidad por un panel de baldosas hidráulicas realizadas por el artista Fábio Flaks, que cruza todo el restaurante y termina en el patio trasero, esta creación otorga una conexión entre los diferentes espacios. El blanco y el gris predominan en los tres pisos, tanto en las paredes como en los techos de todo el proyecto, mientras que los toques de color más brillantes se pueden encontrar en los muebles y obras de arte.
La existencia de tres zonas de mesas y sillas exteriores hace que sea posible almorzar, cenar o simplemente tomar un café en el centro de un jardín con árboles, hojas y flores, casi un oasis urbano.